Este año, en primavera, se conmemoro el 55 aniversario de la batalla de Dien Bien Phu. El plan francés era simple, internándose en territorio enemigo construirán enormes bases aisladas por tierra desde las que quebrar las fuerzas enemigas. Venciendo los vietnamitas fue la primera batalla que ganaba cualquier país colonizado usando tácticas convencionales.
López, léase Egiguren o Ares o, mejor el gobierno, han creído que copiando aquellas tácticas del ejercito colonizador francés conseguirán mejores resultados, decidieron establecer una serie de cabezas de puente en ayuntamientos como Lizartza o muchos otros que gobiernan merced a las artimañas jurídico-políticas y finalmente asentaron sus reales en Ajuria Enea, la base desde la que laminar a todo el soberanismo vasco.
Con una mentalidad propia de quien se sabe sitiado en territorio hostil, López y los suyos tienen que confiar en la potencia de fuego del entramado jurídico-político estatal para tratar de barrer a la IA ya sea proponiendo batallas de desgaste como la campaña contra las fotos ya sea actuando selectivamente y llevándose a Otegi, Diez y a sus otros compañeros.
El ejército vietnamita les dejo hacer, les dejo instalarse en aquel valle y luego comenzó el acoso, lento, implacable, dia tras dia y noche tras noche, primero cayeron las posiciones exteriores en torno al aeropuerto, desde allí, una vez instalados los morteros el aeropuerto dejo de ser practicable al poco tiempo y de allí hasta la toma total de la base fue cuestión de esperar.
La huelga de Mayo y, sobre todo, la movilización plural del dia 17 evidencian el aislamiento de López, esa es la vía, dejar claro que están solos, que no tienen más apoyos que el gobierno de Zapatero y el aceitoso abrazo de Basagoiti. Hay que acosarles dia y noche, que no les salga gratis.
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