Junto a la idea de adoctrinar apelando al sentimentalismo de los alumnos el tándem PP-PSOE además ha tomado muchas otras medidas en torno a las víctimas de ETA que parece pasan más desapercibidas.
Por ejemplo tenemos en el parlamento vasco, presidiendo la comisión de derechos humanos de la Cámara a María del Mar Blanco, hermana de un concejal y dirigente de las Nuevas Generaciones del PP muerto por ETA en 1997. Es la persona idónea para el cargo?. Yo diría que no, es más, que sucedería si los familiares de José Luis Geresta, miembro de ETA que supuestamente participo en la muerte de su hermano y que a su vez fue muerto y mutilado por no “se sabe quiénes” acudirían a pedir su amparo?.
En cualquier caso lo de llevar victimas a las aulas traerá cola, pero no nos engañemos, es lo que pretenden, persiguen que las aulas hiervan, que algunos profesores se nieguen, que algunos alumnos protesten e incomoden con sus preguntas y opiniones a esas víctimas y entonces El Correo o El Mundo abrirán sus primeras con el cuento de lo “enferma que esta la sociedad vasca” y la conveniencia de usar el bálsamo Lopez.
Es interesante comprobar el gobierno Lopez con los primeros pasos dados por el Gobierno González en sus inicios en el 82-84. Además de un brutal recrudecimiento represivo que le salvara la cara ante los militarotes (ahora PP) nos regalaron un verano, el del 83 calentito con la guerra de las banderas, mandaron a los que Ramón Jáuregui definió como “el mejor descubrimiento” del PSOE, la Guardia Civil a poner y escoltar a la bandera de los españoles en cada ayuntamiento vasco que no lo tuviera en sus fiestas, además de golpes también nos dejaron imágenes impagables como los policías nacionales escoltando a la española mientras Bilbao se sumergía en la riada. Colocaron a una serie de localidades en el ojo del huracán, con Renteria a la cabeza y montaron el pollo.
La estrategia actual es la misma, solo que sus medios son ahora mayores, pretenden agitar la enseñanza, encender las iras en los pueblos con la retirada de las fotos y en definitiva todo lo que se esconde bajo lo que ellos llaman normalización que no es otra cosa más que el enfrentamiento con el soberanismo vasco. Van a por todas y vienen de frente, si son capaces de repetir la jugada en las municipales de 2011 preparémonos a mirarnos en el espejo de Nafarroa, porque ese es el horizonte del PSOE.
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